Ruta dos muiños – Rego das cunchas
O rego das cunchas es un minúsculo manantial que discurre por un pequeña fraga situada en la parroquia de Santa María de Roo (Noia), esta fraga se presenta paralela a la vía de alta capacidad, por los lugares de Vilaverde, Paradela y Agrelo, para desembocar en el Río Tambre, a mitad de camino entre Orro y Ponte Nafonso.
O rego das cunchas es un minúsculo manantial que discurre por un pequeña fraga situada en la parroquia de Santa María de Roo (Noia), esta fraga se presenta paralela a la vía de alta capacidad, por los lugares de Vilaverde, Paradela y Agrelo, para desembocar en el Río Tambre, a mitad de camino entre Orro y Ponte Nafonso.
En el Siguiente video se puede ver a grandes rasgos el contenido tanto ambiental como etnográfico de la ruta.
El bosque.
Sin entrar en demasiados detalles se trata de un bosque típico de rivera, con una importante cantidad de pinos y desgraciadamente ya contaminado con eucaliptos, aun así es importante la masa arbórea de especies autóctonas caducifolias, con roble -alguno centenario-, castaño y aliso como protagonistas, pero con otras especies presentes, como son acebos, fresnos, arces, nogales, sauces y avellanos. Interesantes y bien conservadas son algunas masas de helechos real y macho, entre otros , y preciosas masas de musgos y briofitas asociadas a las zonas más húmedas de la fraga y a la piedra de los propios molinos que dan nombre a la ruta.
La fauna.
Hasta el momento sólo he hecho tres visitas al lugar, dos antes de la «restauración» del camino y una tras la misma, la fauna observada es la típica de estos espacios cercanos a núcleos urbanos y cercados por carreteras, ardilla roja, erizo y musaraña serán los mamíferos que se dejarán ver con relativa facilidad y si se sabe como, cuando y donde buscar, aunque obviamente se presupone la presencia de otros mas esquivos y con horarios de actividad menos óptimos para el visitante. En cuanto a reptiles, sin prácticamente salirse del camino principal y los senderos, es posible observar culebra de collar, víbora de seoane, lagarto ocelado, lagarto verdinegro, lución y eslizón tridáctilo, y en la lista de anfibios «localizables» están Salamandra común, Salamandra rabilarga, Sapo corredor, Sapo común, Tritón ibérico y Tritón jaspeado.
Llaman la atención algunos montones recogidos de madera en descomposición localizados a lo largo de todo el recorrido, sería toda una sorpresa que fuesen puestos ahí intencionadamente para la manutención de escarabajos saproxilófagos como el ciervo volante.
La ruta de los molinos.
Se trata de un viejo camino de carros recuperado en zahorra, de poco mas de un kilómetro de longitud y entre dos y tres metros de ancho, es un camino cómodo y fácil, apto para prácticamente cualquier caminante, tiene algunas pendientes pronunciadas pero de fácil ejecución, de el sale distintos senderos que conducen a una serie de molinos, casi todos en estado ruinoso y un par de ellos restaurados, pero con un alto valor etnográfico.
La mejor forma de disfrutar de esta ruta es ir caminando desde Noia (3,5 km.) o desde Ponte Nafonso (1,2 km.), siempre teniendo en cuenta que hay que caminar un tramo de la AC-196 que no dispone de arcén ni espacio alguno para peatones, con el peligro que eso acarrea; también se puede llegar en coche hasta el inicio de la ruta donde hay un pequeño espacio para aparcar no mas de 3 coches.
Se echa en falta la prohibición de tránsito de vehículos a motor por la ruta, puesto que motos y quads representan un serio peligro para los senderistas, a parte de la inevitable degradación del camino que esos vehículos produce.
Como llegar: