La garcilla bueyera o garza boieira (Bubulcus ibis), es ya desde hace algunos años una visitante invernal de la ensenada de Noia en grupos relativamente abundantes, aunque se puede observar algún ejemplar durante todo el año, lo normal es que a finales del verano aparezcan una o varias bandadas para alimentarse en la zona, llegando a sumar, como este invierno, hasta 24 individuos. Hace algunos años descubrieron la despensa de lombrices que representan los jardines del paseo marítimo de Noia y actualmente es fácil encontrarlas disfrutando de estos invertebrados cuando dichos jardines están encharcados por la lluvia.
Estos días podemos disfrutar del espectáculo de las garcillas bueyeras / garzas boieiras en los jardines del paseo marítimo de Noia, siempre y cuando esté lloviendo o haya llovido en abundancia las horas previas, merece la pena y no hace falta equipación alguna, incluso se pueden ver desde alguna de las terrazas del paseo.
Esta garza, de tamaño medio, se caracteriza por tener un cuello y patas relativamente cortas, al menos si se toman las proporciones de sus vecinas zancudas como la garceta común o la garza real, bastante compacta y con el plumaje blanco a excepción de algunas zonas anaranjadas en el pecho, la nuca y la espalda durante la época nupcial, pero es el pico, amarillento, anaranjado o incluso rojizo lo que la diferenciará siempre de su prima la garceta común.
